Un partido lento se volvió
vértigo puro y castigó a los de Zidane. Increíble. Inesperado. Impensable. Real
Madrid vio cómo Manchester City le remontó y lo venció 1-2 en la ida de los
octavos de final de Champions League. ¿Golpe mortal? No, pero casi.
El juego pasó de un inicio lento a un complemento de
vértigo, con premio para los de Guardiola. A los 19 Mahrez metió un riflazo que
Courtois salvó a puro reflejo. Fue la primera opción de gol de un juego poco
lúcido, pues ambos equipos apostaban a esperar un poco la propuesta del otro,
intentando no rifar la pelota, limitando al máximo los riesgos.
La respuesta del local tardaría hasta el minuto 29,
cuando Benzema disparó con potencia y en el rebote, increíblemente, Vinicius no
atinó a rematar.
Casemiro corrigió el error defensivo, que involucró a
Courtois, y que estuvo a punto de abrir el marcador a favor del City, en un
‘buscapiés’ que inquietó a más de uno en las tribunas del Santiago Bernabéu…
Allí donde James Rodríguez veía el partido, tras quedar fuera de la
convocatoria por decisión técnica.
En el complemento parecía Mahrez contagiar a los suyos
de ambición con un remate cruzado, amenazante pero sin la dirección suficiente,
y él mismo a los 55 y a los 56 minutos, probaba por partida doble los reflejos
del portero rival. Era el mejor momento del City. ¿Real Madrid? Como que no se
enteraba que el segundo tiempo ya estaba en juego, pero como que sí: apareció
Isco a los 60 minutos oportuno para recibir una asistencia de Vinicius a la
salida del portero. Besos a la tribuna, consciente que sacaba a su equipo de un
momento complejo.
Una más tuvo el local en una gran jugada de Isco que
no logró finalizar Ramos y el juego de los de Zidane creció. Hasta que Mahrez
echó un balde de agua fría sobre el entusiasmo blanco: en un centro de costado
se anticipó Mahrez y a los 76 e igualó el marcador 1-1.
Entonces, comenzó otro partido en el Bernabéu. Ahora
Gabriel Jesus se animaba por la victoria en medio de las protestas
injustificadas de los madridistas: No, no había falta en el gol del empate.
Y entonces la pesadilla: una falta en el área clara de
Carvajal sobre Sterling supuso el gol de penalti de De Bruyne. ¡Dos goles de
visitante! Amenaza mortal a los récords de Zidane en Champions.
¿Algo podía salir peor? Sí. Ramos fue expulsado por
falta contra Gabriel Jesus, entrando al área. Noche dulce para el brasileño,
figurón en el Bernabéu.
Y así, con todo en contra, va ahora Real Madrid a
Manchester para intentar una hazaña, que otras veces ha sido posible pero que
ahora, sin Ramos y con la obligación de ganar por un marcador amplio, debe
parecerse a un milagro.
El compromiso de vuelta se jugara el Martes 17 de Marzo en el Etihad stadium .
Imagen : Champions League twitter oficial.
Lyon - Juventus : Olympique de Lyon dio la gran sorpresa al
doblegar por la mínima a la Juventus en el partido de ida de octavos de final
de la Champions League, además de cortar la racha goleadora de Cristiano
Ronaldo. Hacía más de diez años que la todopoderosa Juve no caía ante un equipo
francés y lo hizo ante un conjunto lionés que llegaba con la baraja de
cenicienta del torneo.
El técnico lionés Rudi Garcia acertó con su
planteamiento y consiguió neutralizar la capacidad ofensiva juventina con un
bloque defensivo bajo y compacto. Pero además contó con un Aouar estelar. El
centrocampista francés dio todo un recital de juego. Ronaldo por su parte
apenas apareció, eso sí, en cuanto tocaba el balón a la zaga francesa le
entraba la tiritona. El portugués fue el primero en avisar con una centro chut
que se fue ligeramente desviado a los cuatro minutos con el portero ya vencido.
Pero fue el Lyon quien mostró más ambición. Una vez superados los nervios iniciales
el equipo se soltó y comenzó a llegar con peligro al área de Szczesny. En el
minuto 20 Toko Ekambi envió el primer aviso con un cabezazo que hizo temblar el
larguero.
La Juve respondió con un nuevo centro de Ronaldo que
despejó Cornet como pudo después de que Lopes saliera a por uvas. Pero el
partido era de Houssem Aouar que se permitió el lujo de primero retratar a
Dybala con un caño de los que duelen y poco después a Danilo regateándole en la
línea de fondo para después centrar atrás y que Tousart abriera el marcador.
Corría la primera hora de partido y la Juventus se veía a remolque y sin
soluciones puesto que no acertaba a controlar el juego ante la garra y el
empuje de los locales. Como muestra de la intensidad de la zaga lionesa De Ligt
tuvo que jugar con la cabeza vendada al sufrir un corte y sangrar de manera
abundante tras un barullo en el área en el que choco con varios jugadores. En
la segunda parte la cuestión estaba en si el Olympique iba a poder mantener el
mismo nivel de juego y la concentración ante la mayor experiencia de su rival
en este tipo de encuentros.
La Juventus empezó a rondar el área de Lopes con mayor
asiduidad pero sin gran peligro. Pjanic y Dybala no lograban tomar el mando del
partido nisiquiera conectar con Ronaldo. Maurizio Sarrio decidió entonces
introducir a Ramsey a cambio de Pjanic. El ataque italiano se volvió entonces
más dinámico y fue entonces cuando comenzó a enseñar los colmillos. Dybala tuvo
el gol del empate en sus botas pero su disparo desde el corazón del área tras
un gran centro de Sandro se le fue fuera. Sarri volvió a mover ficha y dio
entrada a Higuaín por Cuadrado, ademas de sentar a Rabiot por Bernardeschi. Más
gasolina para tratar regresar a Turín con al menos un empate.
Un carburante que ya no tenia el Olympique que acabó
desfondado y mirando al reloj. La mala punteria de Higuaín evitó que la grada
lionesa se llevara un disgusto, así como un fuera de juego que anuló un gol de
Dybala. El argentino y Ronaldo, que llevaba 11 jornadas seguidas marcando en la
liga italiana, reclamaron además sendos penaltis pero al árbitro Jesús Gil
Manzano no le tembló el pulso y puso término al partido que deja a la Juventus
a mercer de una remontada en Turín el martes 17 de Marzo .
Por : Santiago Valencia Diaz .
Imagen : Efe.com